Mi familia paterna es de origen alemán, pero ya por más de tres generaciones habíamos sido adventistas. Comprendí algo mejor del significado de “anabautista” en el año 2.000 cuando renuncié a la iglesia adventista y tomé un curso de historia menonita en el Instituto Bíblico Asunción (Campus IBA Sajonia) con el profesor Gerhard Ratzlaff. El año 2001 me hice miembro de una iglesia menonita.
En ese proceso me sentí apasionado por la fe de los primeros anabautistas, que en Suiza, Alemania y Países Bajos surgieron durante el primer cuarto del siglo 16. Me gustaba mucho ese mote de “ala izquierda de la reforma”, aunque ellos no tenían nada que ver con la izquierda política comunista. El sentido más pertinente es el de “la reforma radical”, que pretendía llevar a la práctica concreta la formación de iglesias netamente basadas en el modelo de la iglesia del Nuevo Testamento.
Mis compañeros en la materia con Ratzlaff eran estudiantes provenientes de iglesias Hermanos Menonitas, tanto de trasfondo étnico alemán (los rubios), como también de iglesias nacionales (los latinos). Notaba yo que, extrañamente ni los unos ni los otros estaban demasiado entusiasmados con la materia, mientras yo leía apasionadamente libros y más libros, y lloraba de emoción a ver los videos vhf que existían en esa época sobre el tema.
El nombre Anabautista (rebautizador)
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| Anabaptistas congregados clandestinamente en la embarcación de Peter Piersz, representados en una ilustración de Jan Luyken. |
Con el pasar del tiempo estudié la carrera de periodismo, y aprendí a armar blogs. Allá por 2018 se me ocurrió la idea de iniciar un blog sobre el anabautismo. Ya tenía un par de blogs más, y a este lo llamé “Anabautista Digital”, iniciando en enero de 2019. En esa época también las grandes instituciones menonitas de EEUU formaron la revista Anabaptist World, y el Instituto para el Estudio del Anabautismo Global (ISGA: Institute For The Study Of Global Anabaptist).
El cambio de nomenclaturas era resistido por muchas personas. Durante centenares de años, los nombres oficiales de las instituciones fueron Menonita; Hermanos Menonitas; Iglesia de los Hermanos o Iglesia Evangélica Menonita. Otras iglesias más pequeñas eran Hutteritas, Amish, Bruderhoff o algunas otras como las nacientes comunidades emergentes anabautistas de Inglaterra, Australia y Nueva Zelanda.
El consenso es que estos diferentes grupos tienen entre 8 y 12 puntos en común en su fe y práctica, provenientes del movimiento anabautista del siglo 16.
Actualmente se está consensuando en modificar el nombre del Congreso Mundial Menonita (CMM) a Congreso Mundial Menonita Anabautista. Yo incluso preferiría que fuera solamente Congreso Mundial Anabautista, ya que gran parte de las iglesias miembros no son iglesias Menonitas.
El término Menonita está muy asociado a una cultura e idioma determinado, mientras el anabautismo en general es variado teológica, cultural y lingüísticamente. Solo por mencionar un ejemplo, el grupo de iglesias más grande del mundo anabautista es la iglesia Messerete Kristos (Cristo es el fundamento) de Etiopía, con alrededor de 500.000 miembros bautizados y activos.
En Paraguay somos unos 40.000 anabautistas, menonitas étnicos, y también iglesias nativas y nacionales que fueron fundadas por menonitas pero que no se identifican con este nombre, aunque sí son de fe anabautista.
Personalmente soy miembro de una iglesia menonita, pero culturalmente estoy más cercano a los grupos emergentes o los nuevos anabautistas (más similar a los grupos de Inglaterra, Australia y Nueva Zelanda).
Recientemente he pedido y recibido el bautismo anabautista (luego de haber sido miembro menonita por más de 20 años) por la convicción que recibí del Señor sobre la no validez de mi bautismo que había recibido a los 9 años en la iglesia adventista.
Los hermanos suizos (enero de 1525 en adelante)
Allí, un grupo de jóvenes, estudiaban la Biblia con el reformador Ulrico Zwinglio, llegaron a la convicción de que los reformadores no estaban dispuestos a ir hasta las últimas consecuencias en las reformas de la iglesia conforme al modelo del Nuevo Testamento.
Y el punto de inflexión fue el tema del bautismo de creyentes. Los católicos habían bautizado infantes por más de 1.200 años, y continuaron con este formato o rito las demás iglesias cristianas, ortodoxos, luteranos, anglicanos, reformados, etc. incluyendo la iglesia de Zwinglio.
Fue así que estos jóvenes de Zúrich decidieron en primer lugar no bautizar a sus hijos recién nacidos, y bajo amenaza de expulsión o cárcel, decidieron en una reunión bautizarse unos a otros el 21 de enero (1525).
Esto fue realmente una verdadera revolución, ya que fue contra lo establecido por la autoridad civil, que empezó a perseguir e incluso matar por ahogamiento, fuego o decapitados a centenares de fieles (hombres y mujeres) que defendieron su fe con la paz, con la pluma, y con el testimonio público. Actualmente, no nos damos cuenta de lo que costó para estos hermanos el tema del bautismo de creyentes, ya que la mayor parte de las iglesias evangélicas lo practican sin ningún tipo de persecución.
Esta persecución fue llevando el mensaje anabautista por toda Europa, y luego a Ucrania, y más adelante a casi todo el mundo, donde hoy existen más de 2 millones de miembros que se adhieren a la fe anabautista.
Concluyo compartiendo que el movimiento anabautista del siglo 16 fue:
- Un movimiento centrado en Jesús que se comprometió a seguirlo
- Un movimiento de discipulado que tomó en serio el Sermón del Monte
- Un movimiento de plantación de iglesias, pionero en nuevas expresiones de iglesia.
- Un movimiento que tomó en serio el sacerdocio universal de los creyentes, que empoderó a sus miembros, hombres y mujeres
- Un movimiento por la paz que rechazó la violencia y abogó por la libertad religiosa
- Un movimiento por la justicia integral, incluyendo la económica
- Un movimiento perseguido que sufrió el exilio, el encarcelamiento y la ejecución
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| 500 aniversario de la fe anabautista |
Los anabautistas fundaron las primeras iglesias libres de la era moderna en Europa: libres del control estatal, libres de las iglesias estatales.
Los anabautistas rechazaron la idea de que la Biblia era plana y cualquier intento de utilizar el Antiguo Testamento para marginar, ignorar o descartar las enseñanzas de Jesús.
Los anabautistas rechazaron el sistema de la cristiandad y la suposición de que Europa era cristiana y, en cambio, enviaron cientos de misioneros por toda Europa.
Los anabautistas rechazaron la coacción en relación con la fe y abogaron por la libertad de conciencia para todos.
Los anabautistas rechazaron el bautismo infantil por considerarlo antibíblico y pastoralmente perjudicial, y en lugar de ello bautizaron a aquellos que respondieron al evangelio y se comprometieron a seguir a Jesús.
Los anabautistas rechazaron el uso de la violencia letal en el sistema judicial y la guerra, comprometiéndose en cambio con la no violencia y el establecimiento de la paz.
Los anabautistas rechazaron los juramentos por considerarlos contrarios a las enseñanzas explícitas de Jesús y, en cambio, se comprometieron a decir la verdad en todas las circunstancias.
Por tanto, no sorprende que los anabautistas fueran perseguidos tanto por católicos como por protestantes, quienes los consideraban una seria amenaza para la Iglesia y el Estado. Hubo cientos de mártires que fueron quemados en la hoguera, decapitados o ahogados. Con el tiempo, esto llevó al movimiento a la clandestinidad o dio lugar a la migración de refugiados en busca de lugares seguros.
Pero el movimiento sobrevivió y ahora es global. En las sociedades post-cristiandad, donde los cristianos son miembros de comunidades eclesiales marginales, la visión anabautista tiene mucho que ofrecer. Y los cristianos de muchas denominaciones y tradiciones están descubriendo esto.
Por supuesto, es tentador idealizar un movimiento que nos inspira. Los anabautistas estaban lejos de ser perfectos. En su búsqueda de una iglesia pura de discípulos fieles, a veces se peleaban entre sí o se volvían duramente críticos. Se dieron cuenta de que se estaba haciendo mal uso del Antiguo Testamento, pero no estaban seguros de qué hacer con él. Bajo presión y tortura, a veces se retractaron y negaron su fe, pero muchos otros permanecieron fieles. Y en ocasiones se impacientaron y trataron de imponer sus convicciones por la fuerza, traicionando uno de sus principios fundamentales.
Recursos anabautistas:
Los anabautistas rechazaron la idea de que la Biblia era plana y cualquier intento de utilizar el Antiguo Testamento para marginar, ignorar o descartar las enseñanzas de Jesús.
Los anabautistas rechazaron el sistema de la cristiandad y la suposición de que Europa era cristiana y, en cambio, enviaron cientos de misioneros por toda Europa.
Los anabautistas rechazaron la coacción en relación con la fe y abogaron por la libertad de conciencia para todos.
Los anabautistas rechazaron el bautismo infantil por considerarlo antibíblico y pastoralmente perjudicial, y en lugar de ello bautizaron a aquellos que respondieron al evangelio y se comprometieron a seguir a Jesús.
Los anabautistas rechazaron el uso de la violencia letal en el sistema judicial y la guerra, comprometiéndose en cambio con la no violencia y el establecimiento de la paz.
Los anabautistas rechazaron los juramentos por considerarlos contrarios a las enseñanzas explícitas de Jesús y, en cambio, se comprometieron a decir la verdad en todas las circunstancias.
Por tanto, no sorprende que los anabautistas fueran perseguidos tanto por católicos como por protestantes, quienes los consideraban una seria amenaza para la Iglesia y el Estado. Hubo cientos de mártires que fueron quemados en la hoguera, decapitados o ahogados. Con el tiempo, esto llevó al movimiento a la clandestinidad o dio lugar a la migración de refugiados en busca de lugares seguros.
Pero el movimiento sobrevivió y ahora es global. En las sociedades post-cristiandad, donde los cristianos son miembros de comunidades eclesiales marginales, la visión anabautista tiene mucho que ofrecer. Y los cristianos de muchas denominaciones y tradiciones están descubriendo esto.
Por supuesto, es tentador idealizar un movimiento que nos inspira. Los anabautistas estaban lejos de ser perfectos. En su búsqueda de una iglesia pura de discípulos fieles, a veces se peleaban entre sí o se volvían duramente críticos. Se dieron cuenta de que se estaba haciendo mal uso del Antiguo Testamento, pero no estaban seguros de qué hacer con él. Bajo presión y tortura, a veces se retractaron y negaron su fe, pero muchos otros permanecieron fieles. Y en ocasiones se impacientaron y trataron de imponer sus convicciones por la fuerza, traicionando uno de sus principios fundamentales.
Recursos anabautistas:
Anabautista Digital 500
Sobre el autor: 
Wolfgang A. Streich es paraguayo, y está casado con Ruth. Tiene un bachiller en Teología y una Lic. en periodismo. Es miembro de la iglesia menonita Concordia y coordinador de Anabautista Digital 500 y corresponsal de Anabaptist World. Dirige también la página Buenas Noticias Ilimitadas.
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